miércoles, 12 de diciembre de 2012

Leyendas de los siete mares #1

Inauguro esta nueva sección, en la que hablaré de distintas leyendas y personajes de los siete mares, con una verdadera leyenda andante, Barbanegra. Por si no lo habéis intuido ya, tenía la barba negra.

BARBANEGRA (Edward Teach):

Probablemente uno de los personajes más célebres de todos los tiempos, y sobre el que más leyendas, mitos e historias se cuentan y circulan por ahí desde el siglo XVIII, a pesar de que su carrera como pirata apenas duró dos años (1716-1718), pero fueron sin duda dos años ajetreados y de siembra de mucho terror.  Pues buen, aunque este hombre llegó a ser alguien conocido y temido a lo largo y ancho de las costas del sur de Norteamérica, sus comienzos fueron bien normales (para la época, claro). Sin más dilación, repasemos su vida, lo verídico, lo ficticio, y su leyenda.

SU HISTORIA:

Su nombre era Edward Teach, y no se conoce con exactitud ni la fecha ni el lugar de su nacimiento. Lo que sí sabemos es que era inglés, y la teoría más extendida y aceptada es la que dice que nació en la ciudad de Bristol, hacia el año 1680. No obstante, existen otras teorías que afirman que era oriundo de Carolina del Sur (actuales EEUU, pero colonia británica en el siglo XVII), incluso de Jamaica. Poco se sabe del lapso de tiempo entre su nacimiento y sus inicios en la marinería. Lo que sí es cierto es que participó en la Guerra de Sucesión Española (1701-1713), conflicto que enfrentó a los partidarios de la dinastía borbónica (España fiel a Felipe V, Francia y Baviera) y a los partidarios de la dinastía de los Austrias (España fiel al archiduque Carlos, Austria, Prusia, Hánover, Gran Bretaña, Países Bajos, Saboya y Portugal) y que concluyó con la firma del Tratado de Utrecht (que supuso la paz entre los anteriores países, la división territorial de España y el reconocimiento de Felipe V como Rey). La España de los siglos XVII y XVIII guerreando casi sola contra medio mundo, como siempre. Pero dejemos la guerra de lado y centrémonos en nuestro amigo.

Edward Tech participó en el, digamos, capítulo norteamericano de esta Guerra de Sucesión Española, concretamente en la Guerra de la Reina Ana, como parte de los conflictos entre la borbónica Francia y la austracista Gran Bretaña por el control del continente americano. Edward fue filibustero (piratas que bordeaban la costa con sus embarcaciones y atacaban y saqueaban pequeñas localidades, puertos y naves enemigas) al servicio de la Corona Británica. Tras la firma del Tratado de Utrecht y el final de la guerra en 1713, Edward y miles de militares que lucharon por la Corona quedaron desocupados. Fue entonces cuando comenzó su carrera de pirata, posiblemente hacia 1716. Comenzó navegando para el capitán y pirata inglés Benjamin Hornigold, todo un caballero para la época, que sólo saqueaba por necesidad y no por vicio, y que terminó recibiendo el perdón del rey Jorge I de Inglaterra y trabajando como corsario para Gran Bretaña. 



Ilustración de un grupo de filibusteros atacando una nave enemiga y con intención de abordarla. 



Edward Teach, de una naturaleza más violenta y viciosa, decidió dejar la tripulación de Hornigold y convertirse en capitán de su propio barco hacia 1717. Utilizó una fragata francesa que había capturado poco antes junto a Hornigold, al que llamó "The Queen Anne´s Revenge", su nuevo buque insignia. Se dedicó a entablar combates con buques mercantes y milicianos de las principales rutas comerciales del sur de la costa este de Norteamérica y estableció varios refugios para piratas en Las Bahamas y ambas Carolinas (del norte y del sur, para los rezagados), además de los actos propios de un pirata, como la organización de muchas y estruendosas juergas que acababan las reservas de ron de cualquier taberna. 

Adquirió un acta de gracia en 1718 por parte del gobernador de Carolina del Norte, Charles Eden, por el que Edward y su tripulación (que rondaba los 400 hombres, con un total de cuatro navíos) adquirieron la impunidad ante las autoridades de la zona. El gobernador se quedaba con un porcentaje de lo saqueado por el famoso pirata, y éste comerciaba con lo restante a un bajo coste. Ese mismo año sitió la ciudad de Charleston, bloqueando su puerto y secuestrando a parte de la población a cambio de un buen aprovisionamiento de medicinas puesto que, según afirman algunos historiadores, su tripulación padecía de cierta enfermedad venérea. Tras el asedio de Charleston, Edward Teach dejó de lado la piratería, recibiendo el perdón del rey Jorge I junto con su tripulación y legando su tripulación y buques a Stede Bonnet, un antiguo camarada, que fue capturado por mandato del gobernador de Carolina del Sur, condenado a la horca y colgado el 10 de diciembre de 1718. 

El final para Barbanegra llegó de la mano de Alexander Spotswood, gobernador de Virginia, que organizó una escuadrilla de balandras y buques para capturar al ex-pirata, a petición de la población de la zona, cansada de las fechorías que cometió Edward Teach. Tras una cruenta batalla naval, Barbanegra y una reducida tripulación abordaron uno de los navíos enemigos. En aquel navío se encontraba el teniente inglés Robert Maynard, con el que entabló combate cuerpo a cuerpo. Barbanegra desarmó hábilmente al teniente con un corte de espada en su mano. Sin embargo, el teniente sacó su pistola y, justo antes de que Barbanegra lo rematara, le disparó. Ya en el suelo, Maynard degolló a Barbanegra y colgó su cabeza en el mástil de su nave hasta su llegada a Virginia, donde fue vitoreado y felicitado por la población sedienta de venganza y algo de sangre. 


"Captura de Barbanegra", de Jean Leon Gerome Ferris (1863-1930). En el cuadro se aprecia el momento del abordaje del barco del teniente Maynard. En el centro, Barbanegra a punto de asestar un sablazo mortal al teniente inglés, que sostiene una pistola para disparar al pirata. A su alrededor, una cruenta lucha entre ambas tripulaciones. En la parte superior derecha se aprecia la famosa bandera pirata del barco de Barbanegra, cuyo uso se le atribuye al famoso pirata como promotor del célebre símbolo de la piratería.


SU APARIENCIA:

¿Qué fue lo que hizo tan conocido a este hombre? La vida que llevó fue la misma que otros tantos piratas de las costas americanas. Sin duda, su apariencia fue un factor clave para la cosecha de tantísima fama. Edward Teach se presentaba en combate de forma extravagante, más concretamente tocado con un gran tricornio con plumas, armado a conciencia con espadas, cuchillos y una pistolera con pistolas de diversos calibres, además de acicalar su oscura barba con mechas de cañón que le colgaban y que encendía cuando entraba en combate. Quienes le vieron luchar decían que se parecía al diablo, con su penetrante mirada y una nube de humo en torno a su rostro. Todo esto sumado a una estatura de casi 2 metros...en fin, tenía que inspirar respeto...como mínimo.


Ilustración de Edward Teach "Barbanegra". Se aprecian las mechas de cañón de su barba, que desprenden humo, y su llamativo armamento, que constaba de varias pistolas y trabucos.


SU BARCO ("The Queen Anne´s Revenge"/ "La Venganza de la Reina Ana"):

Lo primero es lo primero, y os preguntaréis por qué ese nombre tan largo, por qué no otro. Pues bien, la Reina Ana de Inglaterra fue reina de Inglaterra (oh, Dios santo), Irlanda y Escocia entre 1707 y 1714, y última soberana de la casa de la famosa familia Estuardo. En el marco de la ya comentada Guerra de Sucesión Española, la Guerra de la Reina Ana fue nombrada así en su honor, puesto que en América guerreaban tropas británicas y francesas por el poder, y las tropas británicas eran mandadas por esta reina hasta su muerte, el 1 de agosto de 1714 (sí, la Guerra de Sucesión terminó en 1713, pero en América hubo siglos de enfrentamientos entre franceses e ingleses por el dominio del norte de la misma). Así, el buque insignia de Barbanegra fue nombrado como "La Venganza de la Reina Ana" en honor a esta reina, que murió sin ver el control total inglés sobre suelo norteamericano (dicho control no llegó nunca, peor la mujer tenía esa ilusión). El sucesor de la Reina Ana fue su primo, el Rey Jorge I, del que ya hemos hablado en la historia de Barbanegra. 

Antes de que Edward Teach abandonara la tripulación de Hornigold, el futuro corsario inglés navegaba cerca de Martinica cuando atisbó una fragata francesa que transportaba esclavos, en 1717. Dicha fragata fue inglesa en sus orígenes, construida en Gran Bretaña en 1710, y se llamaba "Concord". En 1711 los franceses la capturaron y la nombraron "Le Concorde" (franceses originales y ávidos ha habido siempre). Hornigold y su tripulación persiguieron y capturaron la fragata y la hicieron pirata, armándola con varias docenas de cañones. Cuando Hornigold dejó la piratería para adquirir el perdón del rey, Edward Teach tomó su rol de capitán del barco y, en un verdadero alarde de ingenio diferenciador de los franceses que la capturaron antes, lo llamó "The Queen Anne´s Revenge", "La Venganza de la Reina Ana" en español. Fue el barco que Barbanegra utilizó en el bloqueo naval de la ciudad de Charleston (Carolina del Sur) en 1718. Cuando Barbanegra recibió el perdón de los ingleses a finales de 1718, éste se dirigió con su buque insignia hacia Carolina del Norte. Algunos dicen que abandonó y hundió su propio barco haciendo que escorase por el cambio de lugar de varias y pesadas piezas de artillería para que no fuera utilizado nunca más, otros simplemente dicen que encalló en el lugar conocido hoy como Beaufort Inlet, en la costa de Carolina del Norte, quedando a merced del océano.

En 1996 un grupo de arqueólogos marinos independientes (vulgarmente llamados cazatesoros) encabezados por Chris Southerly hallaron los restos del que aparentemente fuera el buque insignia de Barbanegra, en la costa del estado de Carolina del Norte. El grupo de arqueólogos marinos del Museo Marítimo de Carolina del Norte tomó el relevo de la operación, dirigidos por Mark Wilde Ramsing, que se dedicaron a la recuperación de toda clase de objetos de los restos del supuesto "The Queen Anne´s Revenge" del legendario Barbanegra, entre los que figuran piezas de artillería, oro, espadas, enseres personales, incluso la posible empuñadura de su espada. Además, se pudo arrojar algo de luz sobre el dudoso hundimiento del barco. Se teorizó sobre una intervención británica en el mismo, sobre una captura del barco del famoso pirata y un hundimiento provocado por la Marina Real Británica, que acusó a Barbanegra de tal acto. Actualmente se siguen recuperando piezas de elevado valor histórico y se baraja la posibilidad de reflotar el buque para exhibirlo en un museo.


Modelo a escala del famoso barco de Edward Teach "Barbanegra", "The Queen Anne´s Revenge".



Empuñadura de la supuesta espada de Barbanegra hallada en los restos del "The Queen Anne´s Revenge"



SU BANDERA:


Edward Teach ya tenía el barco, la tripulación, el carácter, la apariencia, y el alias de un pirata. Sólo le faltaba algo más, la bandera. La bandera de un pirata era importante, era su seña de identidad en alta mar. Cuando un pirata comenzaba a adquirir fama (por sus actos impíos) su bandera lo hacía también. Cuando un navío atisbaba un barco desconocido, la bandera servía para conocer el origen, el destino y la nacionalidad de dicho navío. Si la bandera tenía el fondo negro significaba que ese barco era pirata. No obstante, había piratas y piratas, y Barbanegra no era uno cualquiera. Su bandera presentaba un esqueleto sobre fondo negro sujetando un reloj de arena con la mano derecha y una flecha con la izquierda, apuntando a un corazón rojo goteando sangre. El significado de esta bandera viene a ser la muerte (cómo no) simbolizada mediante el esqueleto. El reloj de arena simboliza el poco tiempo de vida que le queda a aquel que atisba la bandera de Barbanegra. Finalmente, el corazón sangrante simboliza la falta de misericordia y piedad de este buen hombre. 




SU LEYENDA:

Varias son las leyendas que circulan por ahí en torno a Barbanegra, como por ejemplo la que afirma que en la lucha entre el teniente Maynard y nuestro pirata, éste recibió 25 heridas, entre ellas cinco disparos, y no sólo uno. También se dice que tras degollarlo, Maynard arrojó el cuerpo de Barbanegra al mar, y que éste flotó alrededor del barco del teniente inglés varias veces antes de perderse en la inmensidad del océano. Otras historias narran los extraños entretenimientos que Barbanegra tenía, como disparar a ciegas en una habitación llena de tripulantes de sus barcos sin herir a ninguno de ellos. 

Se dice también que Charles Eden (gobernador de Carolina del Norte, para los que ya lo hayáis olvidado) le ofreció una joven a Barbanegra, y que éste la obligó a acostarse con gran parte de su tripulación, o que contrajo nupcias con otras trece mujeres, además de aquella joven. No fue un gran logro engatusar a tanta mujer si pensamos que todo pirata era dado a cuatro cosas en su vida: ron, mujeres, rapiña y ron, lo normal para un pirata.

En cuanto a su barco, "The Queen Anne´s Revenge", "La Venganza de la Reina Ana" para los amigos, se decía que estaba embrujado y que obedecía a Barbanegra como si de un perrillo se tratase. 




5 comentarios:

  1. No sé por qué esta entrada no tiene comentarios todavía. Te los curras mucho, me gusta; y por eso te doy mis dies. Además todo el mundo sabe que un buen blogger debe recibir cuatro cosas en la vida: Unos dieses de usuarios taringueros, recomendaciones de otros bloggers, porongas y más dieses de usuarios taringueros.

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  2. Muchísimas gracias por leerlo, honorable individuo

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  3. muy bueno me gusto mucho sabia algunas cosas pero no todas
    :p

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  4. Guáu de personaje y de artículo.

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