I. Una aproximación histórica a lo que hoy conocemos como el KGB:
Por dónde empezar. A veces quiero contar un suceso histórico y debo ir atrás en el tiempo porque el origen de dicho suceso es más antiguo que el mismo. Pero al ir a dicho origen, me doy cuenta de que el origen del origen es aún más antiguo. Es lo que tiene la grandiosa Historia.
Pues bien, empecemos por octubre de 1917. Rusia estaba sumida en la miseria total; el Gobierno provisional de liberales y socialistas que asumió el poder tras el derrocamiento del zar Nicolás II en febrero y el final de la dinastía Románov, no estaba siendo capaz de satisfacer las necesidades de su población; que por aquel entonces no pasaban de un plato de comida, una jornada laboral de 8 horas y la salida incondicional de la Gran Guerra que se estaba librando en Europa. Este Gobierno contaba con cierto apoyo de los famosos sóviets (asambleas de trabajadores), pero debido a estas penurias comenzó a perderlo progresivamente. El partido de los bolcheviques, por aquel entonces más minoritario de lo que pasó a ser después, vio una oportunidad en este hecho, y fue Vladímir Ilich Uliánov (Lenin) el que instigó al partido para derrocar al Gobierno provisional, que se debilitaba por momentos.
Tras un periodo de discursos esperanzadores, vítores, enfrentamientos y tomas de edificios gubernamentales que no relataré en este momento, los bolcheviques llegaron al fin a la cima de la montaña del poder en Rusia, con la caída del desafortunado Gobierno provisional el 25 de octubre de 1917 (en el resto del mundo fue el 7 de noviembre, ya que en el Imperio Ruso se utilizaba hasta entonces el calendario juliano, no el gregoriano).
Después de esto, los bolcheviques aprobaron casi de carrerilla un buen porrón de Leyes y decretos muy necesarios para que la situación en Rusia mejorase; tales como la jornada laboral de 8 horas, la separación de Iglesia y Estado, etc. Aprobadas estas medidas, el Gobierno bolchevique se puso manos a la obra con las instituciones del nuevo Estado ruso y el 20 de diciembre de 1917 creó la famosa Checa; la primera organización de inteligencia política y militar soviética; y, agarraos los machos, aquí comienza la historia del KGB:
I.1 - La Checa (Cheká):
La conocida Checa, creada en diciembre de 1917, sucedió a la no tan conocida Ojrana, el cuerpo de seguridad del antiguo régimen zarista durante el siglo XIX (yo mismo no la conocía antes de escribir esto). La Checa fue fundada por el revolucionario comunista de origen polaco Félix Dzerzhinski, y su principal fin en aquella temprana época de la Revolución no era otro que el de eliminar todo brote contrarrevolucionario. Huelga decir que gozaban de una gran potestad discrecional, potestad que manifestaban en cada patada, puñetazo y tiro en la cabeza en callejones oscuros.
I.2 - La GPU y la OGPU:
Tras la Guerra Civil Rusa, que enfrentó a bolcheviques y partidarios del antiguo régimen zarista entre 1917 y 1923, la Checa pasó a llamarse GPU (siglas en ruso de "Administración Política del Estado"). Cuando los bolcheviques ganan la guerra se instaura oficialmente la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas, lo que trae consigo un nuevo cambio de nombre para la policía secreta soviética. La GPU pasó a llamarse OGPU (siglas en ruso de "Directorio Político Unificado del Estado"), que se encargaba, en pocas palabras, del control de la seguridad en el vasto territorio de la Unión Soviética. Félix Dzerzhinsky fue el director de todos estos órganos hasta su muerte por infarto tras una discusión con Stalin en 1926. Otras teorías afirman que murió por un garrotazo de Stalin a mano abierta. No es broma.
I.3 - El NKVD:
En 1924 muere Lenin, y es Iósif Vissariónovich Stalin (Stalin, alias "el cabrón del bigotazo") el que accede al poder en la URSS. Con Stalin la URSS comienza un fuerte periodo de industrialización y reformas políticas y sociales, así como alguna que otra purga, por si a alguien dentro de las altas esferas del poder de la Unión Soviética se le ocurría hacer competencia a este hombre. Entre estas reformas tenemos, de nuevo, una para el órgano de seguridad del Estado. En 1934 la OGPU pasa a formar parte de un órgano estatal aún más grande llamado NKVD (siglas en ruso de "Comisariado del Pueblo para Asuntos Internos"). El NKVD tenía competencias en asuntos de seguridad, policía, investigación criminal, transporte, bomberos y guardia fronteriza, entre otros.
Fue un agente del NKVD, el español Ramón Mercader, el que viajó a México en una misión súper secreta para asesinar al antiguo líder bolchevique de Petrogrado, Lev Davídovich Bronstein (León Trotski). Además, muchos efectivos del NKVD participaron activamente en la Guerra Civil Española entre 1936 y 1939 en el bando republicano, aunque en la rama más comunista de éste.
Con la entrada de la URSS en la Segunda Guerra Mundial en 1941 se produce un gran lapsus burocrático en el NKVD; que pasó de mano en mano como si de un porro entre quinceañeros se tratase. El Ejército controlaba parte del NKVD en cuanto a inteligencia y espionaje; algunas secciones del órgano se separaron del NKVD para volver después; se creaban nuevos órganos que luego se adherían al tejido general del NKVD y así sucesivamente. Lavrenti Beria (alias: "el sodomita") fue el Jefe del NKVD durante este periodo convulso y hasta 1953.
Una función muy especial que el NKVD tuvo durante la Gran Guerra Patriótica (Segunda Guerra Mundial; pero los rusos la llaman así porque en esta no se retiraron), además de las labores de inteligencia y espionaje, fue la de colocarse tras las filas del grueso del Ejército Rojo en el campo de batalla para disparar a aquellos soldados que decidieran retirarse del combate, desarmados y sabiendo que el combate en cuestión estaba más que perdido. A quién se le ocurre.
Además, gracias a los espías del NKVD en Estados Unidos, Stalin supo a ciencia cierta qué se cocía en el Proyecto Manhattan; por lo que cuando el Presidente Harry S. Truman le comunicó a Stalin en la Conferencia de Postdam de 1945 que los EEUU ya tenían la bomba atómica, Stalin ya conocía dicha información. Los datos recopilados por estos espías sirvieron para que la Unión Soviética lograra desarrollar con éxito su propia bomba atómica en 1949, ya que los Servicios Secretos estadounidenses no lograron descubrir las identidades de los topos entre sus filas hasta la Operación Venona (investigación que descifró mensajes mandados entre embajadas de la URSS en territorio americano durante la Segunda Guerra Mundial y que destapó también las redes de espías soviéticos en el Proyecto Mahattan). La Operación Venona culminó demasiado tarde, cuando la URSS ya tenía los conocimientos necesarios para comenzar a desarrollar un arsenal atómico.
Además, gracias a los espías del NKVD en Estados Unidos, Stalin supo a ciencia cierta qué se cocía en el Proyecto Manhattan; por lo que cuando el Presidente Harry S. Truman le comunicó a Stalin en la Conferencia de Postdam de 1945 que los EEUU ya tenían la bomba atómica, Stalin ya conocía dicha información. Los datos recopilados por estos espías sirvieron para que la Unión Soviética lograra desarrollar con éxito su propia bomba atómica en 1949, ya que los Servicios Secretos estadounidenses no lograron descubrir las identidades de los topos entre sus filas hasta la Operación Venona (investigación que descifró mensajes mandados entre embajadas de la URSS en territorio americano durante la Segunda Guerra Mundial y que destapó también las redes de espías soviéticos en el Proyecto Mahattan). La Operación Venona culminó demasiado tarde, cuando la URSS ya tenía los conocimientos necesarios para comenzar a desarrollar un arsenal atómico.
I.4 - y al fin, el KGB:
La muerte de Stalin en 1953 y la subida al poder de Nikita Serguéyevich Jrushchov (Nikita Kruschev) trajo consigo una nueva etapa de hegemonía para la Unión Soviética; y como ya sabemos, cada nueva etapa para la URSS supone también una nueva etapa para el Servicio Secreto soviético y, sobre todo, un nombre nuevo. El 13 de marzo de 1954 el NKVD se transforma, al fin, en el KGB, la agencia de inteligencia y policía secreta de la Unión Soviética. En esta época el KGB se expande especialmente a los países de la órbita soviética en Europa del este; y ayuda a los grupos de ideología comunista en países como Polonia, Bulgaria, Rumanía, Hungría, la antigua Checoslovaquia y Ucrania a que formen sus propios cuerpos de seguridad que eliminarían progresivamente a todos sus adversarios políticos. Que no pare la Revolución. Como ejemplo, en 1956 se creó el equivalente polaco del KGB, la Sluzba Bezpieczenstwa (SB o Servicio de Seguridad del Ministerio de Asuntos Exteriores).
II. ¿Qué hacía el KGB?
II.1 - Dentro de la Unión Soviética:
La principal función del KGB de fronteras adentro era prácticamente la misma que habían desempeñado los órganos precursores de mismo, como la Checa o el NKVD; proteger la Revolución. El día a día del KGB era la supervisión de la opinión pública sobre el régimen, el control del aparato de propaganda o la eliminación de todas aquellas cabezas que se alzaran de entre la multitud con algún fin contrarrevolucionario o que planearan alguna clase de complot.Una de la operaciones más célebres del KGB dentro de las fronteras de la Unión Soviética fue la realizada durante la Primavera de Praga entre enero y agosto de 1968, en la que la antigua Checoslovaquia experimentó un periodo de liberalización y progresivo alejamiento de la órbita de la URSS, hacia un socialismo menos totalitario. El entonces líder de la Unión Soviética, Leonid Ilich Brézhnev, puso en práctica su infame Doctrina Brézhnev; que consistía en asegurar los Gobiernos comunistas en los países satélites de la URSS a toda costa; y ordenó la invasión total de Checoslovaquia el 20 de agosto de 1968 con tropas y blindados del Pacto de Varsovia, poniendo fin a la liberalización checoslovaca. No fue un método ni mucho menos discreto, por si esperabais agentes del KGB matando tras las filas enemigas a la antigua usanza, pero resultó ser un método efectivo para los soviéticos.
II.2 - Fuera de la Unión Soviética:
Para hablar de las operaciones del KGB en el extranjero debo hacer una pequeña referencia a la estructura interna de este órgano. En pocas palabras, decir que el KGB se organizaba en Directorios. El KGB estaba formado por hasta 15 Directorios, cada uno con unas competencias concretas en un ámbito determinado. Por ejemplo, el 2º Alto Directorio y el 5º Alto Directorio eran los encargados de la seguridad y el control político interno de la Unión Soviética.
Pero en lo que compelía al KGB fuera de las fronteras de la URSS, el 1er Alto Directorio era el que cortaba el bacalao, pues era el Directorio responsable de todas las operaciones del KGB en el extranjero. Este Directorio era una proeza de la burocracia y las cadenas de mando, ya que contaba con numerosos subdirectorios a los que se les asignaba una localización geográfica concreta y; a su vez, estos subdirectorios contaban con su propio organigrama de agentes, aunque las órdenes eran emitidas en todo caso desde Moscú (en la foto: cuartel general del antiguo KGB en el edificio Lubyanka, Moscú).
Sobre el tipo de operaciones que el KGB llevaba a cabo en el extranjero, huelga decir que la mayor parte de éstas no eran otras que las de espionaje a sus enemigos capitalistas de Occidente. Será en el siguiente apartado de esta entrada en el que os haga un popurrí de algunas de las operaciones del KGB en el extranjero más conocidas o, al menos, de lo que de ellas se conoce; así como de otras que no conforman más que especulación, a veces barata, de lo que han sido, son, y seguirán siendo, los secretos mejor guardados del KGB. Ahí va, y os aseguro que empiezo fuerte.
III. Las operaciones más notables del KGB y algunos de sus casos más discutidos y especulados:
III.1 - Posible asesinato de Albert Camus (1960):
Ciertas especulaciones afirman que el accidente automovilístico en el que murió el Premio Nobel de Literatura Albert Camus fue perpetrado por el KGB, debido a que el pensador y escritor francés de origen argelino había condenado la invasión soviética de Hungría en 1956.
Tal invasión se dio tras la Revolución Húngara de ese mismo año, a raíz de la matanza de manifestantes desarmados por parte de la Policía Política Húngara (ÁVH, equivalente húngaro del KGB), que se manifestaban en contra de la tiranía que ejercía la Unión Soviética en Hungría, que demandaba mayor soberanía para elegir un sistema política alejado del Comunismo. La revolución fue aplastada y Albert Camus fue muy crítico con tal hecho, así como con el Ministro de Asuntos Exteriores de la URSS, Dmitri Trofímovich Shepílov, que fue el que ordenó la invasión y del que algunos especulan que ordenó el asesinato de Camus a manos del KGB.
Lo que se sabe acerca del accidente automovilístico que sufrió Albert Camus es que ocurrió el 4 de enero de 1960 en una carretera cercana a un pequeño pueblo francés llamado Villeblevin. El coche, un Facel-Vega, dio un bandazo, chocando contra un árbol y después contra otro. En el coche viajaban, además de Camus, el matrimonio Gallimard y la hija de éste. Michel Gallimard falleció días después del accidente; su mujer e hija salieron indemnes. Albert Camus murió en el acto; cráneo fracturado y cuello roto a causa del aparatoso choque. El informe pericial del accidente reveló que la rueda se bloqueó y eso causó la rotura del eje de la misma.
No os preocupéis, porque esta especulación sobre el asesinato de Camus no ha sido creada a partir de una tarde de aburrimiento de algún bloggero francés. Toda esta hipótesis viene dada de la mano del escritor y traductor checo Jan Zabrana, que afirma en sus diarios que llegó a su conocimiento cierta información reveladora de parte de una persona cercana al KGB, y que hablaba del accidente como una operación orquestada desde Moscú y de un artilugio que se encargó de inutilizar la rueda del coche de la que hablaban los informes del accidente.
Verdad o, insisto, mera especulación.
III.2 - Operación Anádir (1962):
Cuando Fidel Castro accede al poder en Cuba en 1959, en seguida surge el conflicto con el Presidente Eisenhower, que ordena sabotajes a instalaciones militares y económicas cubanas, además del ya legendario Bloqueo Económico, que causó, entre otras cosas, que los cubanos tuvieran que calzar esos roñosos zapatos fabricados en la Unión Soviética.
En abril de 1961 y con el beneplácito del Presidente John F. Kennedy, la CIA orquesta parte de la célebre Operación 40 (destinada a derrocar líderes comunistas en el extranjero), en la que tropas de cubanos exiliados contrarios al régimen de Castro y algunos agentes estadounidenses de operaciones especiales tratan de invadir Cuba en la Bahía de Cochinos para derrocar a Fidel. Esta operación fracasa en menos de 72 horas, gracias a las FAR cubanas (Fuerzas Armadas Revolucionarias), ayudadas en todo momento por el KGB, que ya tenía agentes en territorio cubano antes de este intento de invasión y habían provisto a las FAR de numeroso armamento y entrenamiento.
Estados Unidos comienza entonces a planear una invasión de Cuba a gran escala en la llamada Operación Mangosta; pero los agentes del KGB en territorio estadounidense destapan a tiempo la operación e informan al Gobierno de Fidel Castro. Como contrapartida a los planes de EEUU, el líder soviético Nikita Kruschev propone a Castro la instalación de misiles balísticos en territorio cubano. Comienza así la Operación Anádir, en la que el KGB trata de engañar a la CIA mientras buques militares soviéticos camuflados como mercantes transportan a Cuba un amplio arsenal nuclear, así como una fuerza de casi 50.000 soldados del Ejército Soviético que ayudarían a defender Cuba en caso de invasión estadounidense.
Cuando la CIA detecta esta actividad militar en Cuba y uno de sus aviones espía localiza, el 17 de octubre de 1962, la base de misiles nucleares soviéticos comienza la célebre Crisis de los Misiles de Cuba, en la que el mundo estuvo a sólo un paso de una guerra nuclear. Fue necesaria una costosa y tensa negociación entre EEUU y la URSS para que, finalmente, se cancelara la operación Anádir y se retiraran los misiles de Cuba, así como los misiles estadounidenses de Turquía.
Lo que está claro es que el que apretó el gatillo aquel día fue el joven Lee Harvey Oswald, detenido momentos después del atentado. En realidad esto se presume porque se halló una huella dactilar de Oswald en el arma de fuego homicida, en un edificio de almacenes de la ciudad. Oswald negó en todo momento su participación en el asesinato hasta que le asesinaron a él dos días después del asesinato de Kennedy. El asesino del presunto asesino fue Jack Ruby, un capo mafioso del hampa estadounidense; y fue él el único que confesó haber asesinado a Kennedy.
La versión oficial de los hechos no habla de conspiraciones, ya que el Gobierno de Estados Unidos nunca confirmó la existencia de evidencias que revelasen un posible complot contra JFK por parte de estos dos hombres y alguna organización clandestina. Sin embargo, el ex-diplomático británico en Moscú, Robert Holmes, no piensa lo mismo. En su libro, "Un espía como ninguno", afirma que el espía del KGB, Ivan Serov, fue el que maquinó, junto a Yuri Andrópov, el asesinato de Kennedy.
Robert Holmes afirmaba que para los soviéticos la Crisis de los Misiles de Cuba de 1962 fue un golpe bajo, y que como alguien debía pagar por ello, quién mejor que el Presidente de los EEUU que se vio inmiscuido en dicha crisis y que, visto de cierta manera, frenó los planes de la Unión Soviética. Además, Holmes afirma que Ivan Serov llegó a conocer a Lee Harvey Oswald. Oswald, 55 días antes del asesinato de Kennedy, había pedido a tres diplomáticos soviéticos en Nuevo México un visado para regresar a la Unión Soviética, en la que había residido durante dos años, estando a punto de renunciar a la nacionalidad estadounidense. Este dato se conoce gracias a Oleg Nechiporenko, que estaba presente aquel día junto con otros dos agentes del KGB, amigos de Ivan Serov, y que denegaron la solicitud de Oswald.
Por si fuera poco, existen una serie de grabaciones de las embajadas soviéticas y cubanas en México en las que se escucha a Lee Harvey Oswald ofrecerse a atentar contra Kennedy para, presuntamente, huir luego a la Unión Soviética, en la que, seguro, le pagarían una buena cantidad por tal hecho. Sin embargo, la CIA mantuvo siempre que dichas grabaciones eran falsas, y que la voz que en ellas se escuchaba no era otra que la de un impostor.
Robert Holmes admite en su libro que ni el Gobierno soviético ni el cubano estuvieron implicados en el asesinato de JFK, pero sí mantiene que ciertos miembros de los servicios secretos de ambos países comunistas, como el mencionado Ivan Serov, sí que lo estuvieron, al menos de forma indirecta.
El caso es que tanto Lee Harvey Oswald como Jack Ruby ya pagaron el pavo del asesinato de Kennedy, por lo que se puede dar, oficialmente, por cerrado este caso. No obstante, creo que es importante decir que el 87% de los estadounidenses no se tragan ni por asomo la versión oficial de lo que ocurrió aquel 22 de noviembre de 1963.
El accidente ocurrió estando Yuri pilotando un avión de combate soviético MIG-15 un 27 de marzo de 1968 cuando sucedió el accidente y el caza se estrelló cerca de Moscú. Las causas del accidente no se publicaron hasta pasados unos años. Fue en 1987 cuando una investigación reveló la hipótesis de que una turbulencia pudo desequilibrar la aeronave de Gagarin y esta se precipitara a tierra. Una explicación válida para algunos, pero muy pobre para otros, dado el secretismo que se mantuvo con el caso. Otra teoría hablaba de que el célebre cosmonauta pilotaba el avión de combate en estado de embriaguez, ya que el cosmonauta tenía fama de empinar el codo habitualmente; incluso se llegó a afirmar que fueron los extraterrestres los autores del accidente.
Para relacionar este suceso con el KGB se debe mirar el caso con un poco más de perspectiva. Yuri Gagarin fue el héroe de la Unión Soviética, el símbolo de la hegemonía de esta y de que aunque en 1917 Rusia se encontraba prácticamente en la Edad Media; en 44 años había logrado comenzar la conquista del espacio con total éxito. Gagarin se ganó los corazones de todos los habitantes de la URSS y el de su propio líder en aquel entonces, Nikita Kruschev, gracias al que Gagarin gozó de un vida de comodidades y un privilegiado estatus en la más altas esferas de la Unión Soviética.
Sin embargo, esto cambió cuando en 1964 Nikita Kruschev fue destituido como líder de la Unión Soviética y fue Leonid Ilich Brézhnev el que accedió al poder en la URSS. Gagarin se topó entonces con la realidad del régimen soviético, muy distante de la vida de excesos a la que se había acostumbrado tras su portentoso viaje al espacio. En 1966 fue nombrado vicejefe del Centro de Entrenamiento de Cosmonautas, y es aquí donde comienza la teoría de Boris Murasov, un ex-teniente coronel de la URSS que afirma, en una serie de libros, conocer información muy reveladora sobre el caso que conmocionó a toda la Unión Soviética.
Boris comenzó a investigar el caso en 1989, y afirma en sus libros que entrevistó al mismísimo agente del KGB que , presuntamente, colocó un explosivo en la aeronave de Gagarin; y afirma también que fueron asesinadas otras diez personas para encubrir cualquier implicación del KGB en el asunto. El móvil del que habla Boris no es otro que el del peligro que veían algunos altos cargos de la Administración Soviética al ver que Gagarin; un joven, profesional y libre cosmonauta, podría ponerse al frente del Centro de Entrenamiento de Cosmonautas de la URSS.
La teoría de Boris Murasov goza de cierto fundamento, pues la historia de la Unión Soviética, desde sus orígenes en 1917, está plagada de envidias, tiros en la nuca y purgas indiscriminadas por el poder. La última teoría publicada sobre la muerte de Gagarin es del pasado 2013, en la que el ex-cosmonauta Alekséi Leónov expuso que fue una onda de choque provocada por un caza Sukhoi Su-15 que pasó demasiado cerca del MIG-15 de Gagarin la que provocó que éste se estrellase aparatosamente.
Como en todo; muchas versiones enfrentadas, dato reveladores y otros demasiado confusos. Dad rienda suelta a vuestra capacidad de investigación y razonamiento, camaradas. Sin embargo, supongo que, por una parte, a la Unión Soviética no le interesaría en absoluto revelar que su mayor héroe muriera por una estúpida onda de choque. Cosas.
III.3 - El KGB y el asesinato de Kennedy (1963):
Muchas son las teorías que se siguen formulando a día de hoy sobre el célebre asesinato del Presidente de los Estados Unidos de América, John Fitzgerald Kennedy en Dallas (Texas), el 22 de noviembre de 1963. Y muchas de ellas son las que señalan al KGB como autor de los hechos acontecidos aquel día.Lo que está claro es que el que apretó el gatillo aquel día fue el joven Lee Harvey Oswald, detenido momentos después del atentado. En realidad esto se presume porque se halló una huella dactilar de Oswald en el arma de fuego homicida, en un edificio de almacenes de la ciudad. Oswald negó en todo momento su participación en el asesinato hasta que le asesinaron a él dos días después del asesinato de Kennedy. El asesino del presunto asesino fue Jack Ruby, un capo mafioso del hampa estadounidense; y fue él el único que confesó haber asesinado a Kennedy.
La versión oficial de los hechos no habla de conspiraciones, ya que el Gobierno de Estados Unidos nunca confirmó la existencia de evidencias que revelasen un posible complot contra JFK por parte de estos dos hombres y alguna organización clandestina. Sin embargo, el ex-diplomático británico en Moscú, Robert Holmes, no piensa lo mismo. En su libro, "Un espía como ninguno", afirma que el espía del KGB, Ivan Serov, fue el que maquinó, junto a Yuri Andrópov, el asesinato de Kennedy.
Robert Holmes afirmaba que para los soviéticos la Crisis de los Misiles de Cuba de 1962 fue un golpe bajo, y que como alguien debía pagar por ello, quién mejor que el Presidente de los EEUU que se vio inmiscuido en dicha crisis y que, visto de cierta manera, frenó los planes de la Unión Soviética. Además, Holmes afirma que Ivan Serov llegó a conocer a Lee Harvey Oswald. Oswald, 55 días antes del asesinato de Kennedy, había pedido a tres diplomáticos soviéticos en Nuevo México un visado para regresar a la Unión Soviética, en la que había residido durante dos años, estando a punto de renunciar a la nacionalidad estadounidense. Este dato se conoce gracias a Oleg Nechiporenko, que estaba presente aquel día junto con otros dos agentes del KGB, amigos de Ivan Serov, y que denegaron la solicitud de Oswald.
Por si fuera poco, existen una serie de grabaciones de las embajadas soviéticas y cubanas en México en las que se escucha a Lee Harvey Oswald ofrecerse a atentar contra Kennedy para, presuntamente, huir luego a la Unión Soviética, en la que, seguro, le pagarían una buena cantidad por tal hecho. Sin embargo, la CIA mantuvo siempre que dichas grabaciones eran falsas, y que la voz que en ellas se escuchaba no era otra que la de un impostor.
Robert Holmes admite en su libro que ni el Gobierno soviético ni el cubano estuvieron implicados en el asesinato de JFK, pero sí mantiene que ciertos miembros de los servicios secretos de ambos países comunistas, como el mencionado Ivan Serov, sí que lo estuvieron, al menos de forma indirecta.
El caso es que tanto Lee Harvey Oswald como Jack Ruby ya pagaron el pavo del asesinato de Kennedy, por lo que se puede dar, oficialmente, por cerrado este caso. No obstante, creo que es importante decir que el 87% de los estadounidenses no se tragan ni por asomo la versión oficial de lo que ocurrió aquel 22 de noviembre de 1963.
III.4 - Posible asesinato de Yuri Gagarin (1968):
Yuri Gagarin, el primer hombre en llegar al espacio un 12 de abril de 1961, murió siete años después en un accidente aéreo del que hasta el pasado 2013 aún se especulaba y formulaban teorías reveladoras. No obstante, yo estoy aquí para relacionar su muerte con el KGB y alimentar así nuestro afán paranoico de conspiraciones y demás.El accidente ocurrió estando Yuri pilotando un avión de combate soviético MIG-15 un 27 de marzo de 1968 cuando sucedió el accidente y el caza se estrelló cerca de Moscú. Las causas del accidente no se publicaron hasta pasados unos años. Fue en 1987 cuando una investigación reveló la hipótesis de que una turbulencia pudo desequilibrar la aeronave de Gagarin y esta se precipitara a tierra. Una explicación válida para algunos, pero muy pobre para otros, dado el secretismo que se mantuvo con el caso. Otra teoría hablaba de que el célebre cosmonauta pilotaba el avión de combate en estado de embriaguez, ya que el cosmonauta tenía fama de empinar el codo habitualmente; incluso se llegó a afirmar que fueron los extraterrestres los autores del accidente.
Para relacionar este suceso con el KGB se debe mirar el caso con un poco más de perspectiva. Yuri Gagarin fue el héroe de la Unión Soviética, el símbolo de la hegemonía de esta y de que aunque en 1917 Rusia se encontraba prácticamente en la Edad Media; en 44 años había logrado comenzar la conquista del espacio con total éxito. Gagarin se ganó los corazones de todos los habitantes de la URSS y el de su propio líder en aquel entonces, Nikita Kruschev, gracias al que Gagarin gozó de un vida de comodidades y un privilegiado estatus en la más altas esferas de la Unión Soviética.
Sin embargo, esto cambió cuando en 1964 Nikita Kruschev fue destituido como líder de la Unión Soviética y fue Leonid Ilich Brézhnev el que accedió al poder en la URSS. Gagarin se topó entonces con la realidad del régimen soviético, muy distante de la vida de excesos a la que se había acostumbrado tras su portentoso viaje al espacio. En 1966 fue nombrado vicejefe del Centro de Entrenamiento de Cosmonautas, y es aquí donde comienza la teoría de Boris Murasov, un ex-teniente coronel de la URSS que afirma, en una serie de libros, conocer información muy reveladora sobre el caso que conmocionó a toda la Unión Soviética.
Boris comenzó a investigar el caso en 1989, y afirma en sus libros que entrevistó al mismísimo agente del KGB que , presuntamente, colocó un explosivo en la aeronave de Gagarin; y afirma también que fueron asesinadas otras diez personas para encubrir cualquier implicación del KGB en el asunto. El móvil del que habla Boris no es otro que el del peligro que veían algunos altos cargos de la Administración Soviética al ver que Gagarin; un joven, profesional y libre cosmonauta, podría ponerse al frente del Centro de Entrenamiento de Cosmonautas de la URSS.
La teoría de Boris Murasov goza de cierto fundamento, pues la historia de la Unión Soviética, desde sus orígenes en 1917, está plagada de envidias, tiros en la nuca y purgas indiscriminadas por el poder. La última teoría publicada sobre la muerte de Gagarin es del pasado 2013, en la que el ex-cosmonauta Alekséi Leónov expuso que fue una onda de choque provocada por un caza Sukhoi Su-15 que pasó demasiado cerca del MIG-15 de Gagarin la que provocó que éste se estrellase aparatosamente.
Como en todo; muchas versiones enfrentadas, dato reveladores y otros demasiado confusos. Dad rienda suelta a vuestra capacidad de investigación y razonamiento, camaradas. Sin embargo, supongo que, por una parte, a la Unión Soviética no le interesaría en absoluto revelar que su mayor héroe muriera por una estúpida onda de choque. Cosas.
III.5 - Asesinato de Georgi Markov (1978):
Este es, probablemente, uno de los asesinatos más célebres que perpetró el KGB, ya que se cuenta con pruebas muy reveladoras sobre el caso.
Georgi Markov fue un novelista y dramaturgo búlgaro, más conocido en la Unión Soviética como "un disidente búlgaro que piensa demasiado", ya que Markov vivía en la Bulgaria comunista, en la que la censura estaba a la orden del día, hecho que incomodaba mucho a Markov y que había desestimado muchas de sus obras. Se convirtió en un enorme crítico del régimen comunista de su país (esto empieza a recordarme, sospechosamente, al caso de Albert Camus).
Así, las pocas obras de Markov que habían conseguido ser publicadas fueron retiradas de todas las librerías de Bulgaria; su nombre se manchó para siempre. Ante esta situación, Georgi Markov se exilió a Londres, donde comenzó a trabajar para la BBC y donde pudo criticar el régimen comunista búlgaro sin censura alguna. Cuando todo parecía ir bien para la libertad de expresión y de prensa y, en definitiva, para Markov; sucedió lo aparentemente inesperado.
Era un lluvioso 7 de septiembre de 1978 en la capital inglesa cuando Georgi Markov caminaba a lo largo del Puente de Waterloo, dirigiéndose a su parada de autobús habitual. Entonces, una persona que caminaba en sentido contrario portando un paraguas cerrado en la mano, tropezó y chocó levemente con Markov, golpeándole a éste en la pantorrilla con la punta del paraguas. El extraño se disculpó y siguió su camino, y así lo hizo también Markov. Murió tres días después en un hospital de Londres, tras sufrir fuertes dolores y fiebre altísima.
Una autopsia detallada reveló que la causa de la muerte de Markov fue una diminuta bola metálica, del tamaño de la cabeza de un alfiler, que se encontraba incrustada en la pantorrilla del disidente búlgaro y que había inyectado en su sistema una dosis letal de ricina, una de las más potentes toxinas conocidas. Varios agentes desertores del KGB afirmaron que el asesinato de Markov fue perpetrado por los soviéticos; y el principal sospechoso a día de hoy es el italiano Francesco Gullino, detenido por las autoridades búlgaras por contrabando y obligado a trabajar para el KGB como sicario.
El ya legendario asesinato de Georgi Markov ha sido objeto de interés en muchas ocasiones; la investigación se reabrió en 2008 por parte de la Scotland Yard, pero aún hoy no hay un autor de los hechos ya especificado; aunque las pruebas son, como he dicho al principio, muy reveladoras.
III.6 - Intento de asesinato del Papa Juan Pablo II (1981):
Muchos son los que relacionan el intento de asesinato del Papa Juan Pablo II el 13 de mayo de 1981 directamente con el KGB; y no es para menos. Hay que tener en cuenta diversos factores, y el más importante de ellos es que el ya difunto Papa Karol Józef Wojtyla era polaco. Polonia era uno de los países satélite de la órbita soviética, y el entonces director del KGB, Yuri Andropov, estaba convencido de que la elección de un Papa polaco era una total y completa conspiración contra la hegemonía soviética en Polonia. Además, Juan Pablo II fue un duro opositor al comunismo; y tratándose de una figura tan influyente como la del Papa, no es de extrañar que el KGB se sintiera incomodado.
Lo que sí está claro es que el autor de los 4 disparos al Papa aquel día fue el turco Mehmet Ali Agca. Aquí es donde entran todas las hipótesis posibles en este intento de asesinato. Se ha relacionado a Mehmet con el grupo ultranacionalista turco "Lobos Grises"; con el KGB búlgaro; incluso con el Frente Popular para la Liberación de Palestina. Todo resulta muy confuso, ya que hay una gran variedad de pruebas y testimonios que relacionan a Mehmet con un grupo u otro. Además, el propio Mehmet confunde, ya que renegó del Islam y actualmente muestra su amor por el Catolicismo y su deseo por visitar la tumba de Juan Pablo II y por conocer a su sucesor y ya retirado Papa Benedicto XVI; Joseph Aloisius Ratzinger.
En 2013 Mehmet publicó sus memorias y, para más confusión, acusó en ellas al Ayatolá Jomeini de haberle ordenado asesinar al Papa Juan Pablo II. Pues nada, que viva lo confuso.
III.7 - El Directorio S y el espionaje soviético en la etapa final de la Unión Soviética:
Como último punto de esta entrada sobre el KGB quiero mostraros lo que, personalmente, me ha parecido más interesante. Os decía en el apartado II.2 que el KGB se organizaba en Directorios bien diferenciados, cada uno con sus propias competencias y funciones. Os hablaba, más concretamente, del 1er Alto Directorio del KGB, el encargado de las misiones en el extranjero.Pues bien, numerosos medios, historiadores y expertos hacen referencia al llamado "Directorio S", un subdirectorio que habría formado parte del 1er Alto Directorio y que habría sido una especie de agencia de espionaje soviético en sentido totalmente literal. El autor de "KGB: Historia del Centro", Eric Frattini, define el Directorio S como el órgano encargado de reclutar, entrenar y controlar, a través de agentes del KGB, a espías a los que se les creaban y entregaban identidades falsas. A partir de aquí podemos hablar de una muy extensa red de espionaje que se ha ido destapando progresivamente desde 1992, año en el que un archivista del KGB llamado Vasili Nikitich Mitrojin publicó en el Reino Unido el célebre Archivo Mitrojin; un completo dossier de documentos lleno de datos e información referente a las diversas operaciones de inteligencia que llevaba a cabo el KGB en el extranjero.
Gracias al Archivo Mitrojin se conocieron los nombres y apellidos de muchos espías que trabajaban para la Unión Soviética; entre los que se encontraban Melita Norwood (funcionaria civil británica con acceso a archivos nucleares), Tom Driberg (miembro del Parlamento Británico chantajeado por el KGB), o Robert Lipka (trabajador de la NSA estadounidense). Todos ellos habían colaborado en algún momento con el KGB en tareas de espionaje, traicionando a sus propios países.
Sin embargo y como os he dicho al principio, el Directorio S contaba con agentes en Occidente con identidades falsas, y que se encontraban totalmente integrados en el modo de vida occidental. Eran agentes muy entrenados, que hablaban perfectamente el idioma del país al que eran destinados y que conocían tácticas de espionaje avanzadas. Para mantener mucho mejor sus tapaderas, algunos de estos agentes incluso se casaban y tenían descendencia en Occidente, guardando siempre su verdadera identidad y labor a buen recaudo.
Había agentes del Directorio S en el extranjero a los que se les llamaba "agentes durmientes"; que podían pasar largos periodos de tiempo sin realizar tareas de espionaje y permanecían muy fieles a sus identidades y quehaceres falsos hasta que un oficial del KGB, el llamado Rezident (Residente, jefes de espionaje repartidos por todo Occidente), se encargaba de ponerse en contacto con éstos para labores específicas de espionaje.
Una práctica curiosa del Directorio S era la de las llamadas "Golondrinas"; agentes femeninas que llevaban a cabo la "trampa de miel". Dicha práctica consistía en seducir a ciertos objetivos masculinos de espionaje y practicar sexo con ellos mientras las conversaciones entre la "Golondrina" y el objetivo durante el acto sexual eran grabadas por micrófonos ocultos, con el fin de obtener información y creando una situación en la que el objetivo era extorsionado.
A lo largo de los años 80 hubo muchos casos en los que esta clase de agentes, tanto de un bando y otro (CIA, NSA, KGB, MI6, Mossad...) desertaban y acudían al "enemigo" ofreciendo jugosa información a cambio de grandes sumas de dinero, supongo que porque veían que la Guerra Fría ya estaba durando demasiado o porque, simplemente, eran unos canallas; y había otros agentes que se convertían en agentes dobles, como el ex-agente Oleg Gordiyevsky, agente doble del KGB soviético y del MI6 británico.
Uno de los casos más célebres de deserción en la Unión Soviética de esta época ocurrió en 1981. Fue el caso de Vladimir Vetrov, un alto cargo del KGB, que decidió contactar con los servicios secretos franceses a través de la embajada de Francia en Moscú con el fin de suministrarles información acerca de una práctica muy popular en la URSS; birlar tecnología a Occidente. El dossier completo de documentos que Vetrov entregó a Francia se llamó "expediente Farewell", y revelaba que, desde 1970, un Directorio especializado del KGB se dedicaba a realizar espionaje industrial a países occidentales para, en un trabajo magnífico, robarles tecnología. Malditos listillos comunistas.
Cuando esta información llegó a la Casa Blanca, el entonces Presidente de Estados Unidos, Ronald Reagan, ordenó medidas urgentes para detener aquel festival de tecnología compartida con la Unión Soviética. Fue Gus W. Weiss, un consejero especializado en tecnología de la Casa Blanca, el que ideó un plan tremendamente simple a la par que efectivo; suministrar información errónea a los espías soviéticos. Esta estrategia dio sus frutos en un proyecto soviético de construir un extenso gaseoducto desde Siberia hasta la frontera con Occidente; pues un buen día para EEUU pero malo para la URSS algo salió mal y una enorme explosión arrasó parte de las obras de construcción del proyecto; aparentemente a causa del suministro de información técnica errónea que realizó la CIA.
La información suministrada por Vetrov permitió, además, la detención de numerosos espías del KGB infiltrados a lo largo y ancho de Occidente, destruyendo así una amplísima red de espionaje, vital para la Unión Soviética. Vetrov fue detenido por las autoridades soviéticas y encarcelado por asesinar a un policía, presa del pánico, al creer que su traición a la URSS había sido descubierta. Pues bien, Vetrov acabó confesando lo que había hecho en una especie de manifiesto que escribió durante su estancia en la cárcel, en el que explicaba que había suministrado información a Occidente y criticaba el ya ruinoso sistema soviético, condenado a la desaparición. Vladimir Vetrov fue ejecutado en Moscú el 23 de enero de 1985.
IV. El KGB en la actualidad:
Aunque la Unión Soviética como tal cayó en 1991, tras sucesos como el Caso Farewell en 1981, la caída del Muro de Berlín en 1989 (momento en que la URSS dejó de tener influencia en los países satélites de la misma, que declararon su independencia en 1991) o el Gobierno tecnócrata de Mijaíl Sergéyevich Gorbachov enfocado a una adaptación de Rusia a las nuevas realidades; el KGB siguió presente un tiempo. Fueron efectivos del KGB, junto a altos cargos del Partido Comunista Soviético partidarios de la continuidad de la Unión Soviética, encabezados por Boris Yeltsin, los que dieron un golpe de Estado, sin éxito, contra Gorbachov el 18 de agosto de 1991. Finalmente la actual Federación Rusa se instauró el 25 de diciembre de 1991.
¿Qué pasó el KGB? Pues bien, en mi opinión personal, simplemente se cambió el nombre, al FSB (siglas en ruso de "Servicio Federal de Seguridad"), fundado en 1995. Es más, el actual Presidente de la Federación Rusa, Vladímir Vladimírovich Putin, fue director del FSB entre 1998 y 1999. Decir también que Putin fue agente del KGB recién salido de la Univeridad, desde 1975 hasta 1991, año en que dimitió tras el golpe de Estado de Boris Yeltsin. Es decir, la Federación Rusa está gobernada por un ex-espía del KGB. Locurón.
Como curiosidad, circula últimamente una foto por internet en la que se ve a Ronald Reagan, en una visita a Moscú, dando un apretón de manos a un jovencito niño comunista. Para sorpresa de muchos, se afirma que uno de los acompañantes de Reagan por la capital soviética aquel día no era otro que Vladímir Putin. A mi parecer el de la foto se le da un aire a Putin, pero no sé si lo afirmaría. Hagan sus apuestas.
- Documentos audiovisuales de interés (que suene culto):
No os voy a recomendar documentales, estad tranquilos, que bastante os he documentado ya a los que habéis llegado a leer hasta aquí (mil gracias, por cierto). Lo que vengo a recomendaros es una película y una serie de televisión.
El Caso Farewell - "L´affaire Farewell" (2009):
Una película francesa de Christian Garion que con el nombre lo dice todo. Refleja bastante bien el caso de espionaje que cambió el rumbo de la Unión Soviética. Una thriller sin grandes despliegues de efectos ni escenarios; rodada casi íntegramente en un Moscú que retrata fielmente el ambiente apagado de la capital de un vasto imperio comunista que estaba comenzando a caer. Decir que el personaje de Vladimir Vetrov se llama Serguei Grigoriev, para que no os descoloquéis si la veis y no oís la palabra "Vetrov" en toda a película. Insisto, no es un gran filme, pero entretiene y no deja mal sabor de boca si verdaderamente os ha interesado esta entrada o el mundo de la Guerra Fría en general.
The Americans (2013):
Una serie de ficción que yo mismo comencé a ver hace un par de semanas. Cuenta con tan sólo una temporada, y la segunda ha comenzado a emitirse en Estados Unidos hace poco. La serie cuenta la historia de Phillip y Elizabeth Jennings, dos espías del Directorio S del KGB infiltrados en la sociedad estadounidense de los años 80, durante el mandato de Ronald Reagan. Sus vidas comienzan a complicarse cuando se muda a su vecindario un agente del FBI especializado en contraespionaje. Decir que la serie es tremendamente fiel a las tácticas que utilizaba el KGB, ya que el creador de esta, Joe Weisberg, se ha basado en el célebre Archivo Mitrojin del que os hablaba en el apartado anterior. Sólo he visto cuatro capítulos y ya he podido ver a Elizabeth Jenning haciendo de "golondrina" y pinchando en la pantorrilla a un hombre con un paraguas. Como antes, os recomiendo la serie si os ha interesado esta entrada o el mundo de la Guerra Fría
FUENTES (además de mi cabeza):
- "KGB: Historia del Centro" de Eric Frattini.- 2005
- El País: "¿Fue Albert Camus asesinado por el KGB?" - 2011
(enlace: http://elpais.com/diario/2011/11/05/opinion/1320447611_850215.html).
- El País: "¿Fue Albert Camus asesinado por el KGB?" - 2011
(enlace: http://elpais.com/diario/2011/11/05/opinion/1320447611_850215.html).
- El Mundo America: "El asesinato de JFK, ¿relacionado con la KGB?" - 2012
(enlace: http://www.elmundo.es/america/2012/10/24/estados_unidos/1351105579.html).
- El Mundo Magazine: "¿Murió Yuri Gagarin a manos del KGB?" - 2013(enlace: http://www.elmundo.es/america/2012/10/24/estados_unidos/1351105579.html).
(enlace: http://www.elmundo.es/magazine/m80/textos/yuri1.html).
- ProDavinci: "Los informantes//Vasiliy Mitrokhin y su archivo clandestino" - 2013
(enlace: http://prodavinci.com/2013/05/21/actualidad/los-informantes-vasiliy-mitrokhin-y-su-archivo-clandestino/).
- TeleObjetivo: "El mayor sabotaje de la Guerra Fría" - 2008
(enlace: http://www.teleobjetivo.org/blog/el-mayor-sabotaje-de-la-guerra-fria.html).
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