Hola, estoy escuchando "The Death of you and me" de Noel Gallagher, de la mano de mi colega Josu, que me la ha recordado hace apenas unos minutos. Me siento algo vago últimamente y la verdad, ¡que no tengo nada de ganas de ponerme con los deberes! Me escuecen un poquito los ojos, será por las horas que paso aquí delante, pero la verdad es que es adictivo esto de bloggera, tuentiear, facebookear, youtubear...ya sabéis.
Empiezo a coger gusto a Mac Miller, nunca me ha gustado mucho el rap, pero la verdad es que me gusta cómo suena Mac. Ayer vi el séptimo capítulo de la segunda temporada de The Walking Dead, ¡menudo capìtulo! hubo escenas que me gustaron bastante, alguna que me dejó patidifuso, y el final...¡qué final señores! me gustó mucho la verdad, aunque lo preveía, no dejó de sorprenderme.
Ando escribiendo esto a trompicones, porque voy mirando el reloj, mirando las obras frente a mi ventana y mirando el tuenti cada dos por tres, y bueno, lo que decía, adictivo. El otro día acabé el modo historia del Batman: Arkham City, buen juego, me gustó mucho. Supera con creces al Batman: Arkham Asylum, ¡y hay tanto por hacer! Pero tengo que centrarme en las mates, que por primera vez en mi vida he dejado una asignatura...en fin, como en Walking Dead, preveía lo de las mates, así que, a ello.
En otro orden de noticias, pues mi nuevo objetivo amoroso sigue sin evolucionar como uno querría. Hablamos poco, pero cuando hablamos, me siento cómodo. Es agradable y me gusta. La verdad que espero que esto acabe en buen puerto, creo que merecería la pena.
miércoles, 30 de noviembre de 2011
martes, 29 de noviembre de 2011
sábado, 26 de noviembre de 2011
Arkham City
Only you can make this world seem right
Only you can make the darkness bright
Only you and you alone
can thrill me like you do
and fill my heart with love for only you
Only you can make this change in me
for it's true, you are my destiny
When you hold my hand
understand the magic that you do
You're my dream come true
my one and only you
Only you can make the darkness bright
Only you and you alone
can thrill me like you do
and fill my heart with love for only you
Only you can make this change in me
for it's true, you are my destiny
When you hold my hand
understand the magic that you do
You're my dream come true
my one and only you
martes, 22 de noviembre de 2011
Hoy
Hoy, me he puesto la corona de espinas, y me he sentado en mi trono de papel. Hoy he roto mis pensamientos con toda mi fuerza, hoy no quiero arreglarlos. Hoy los sentimientos han desaparecido, hoy no has sido más que una persona cualquiera, hoy, he seguido detrás de ti.
Hoy me he defraudado, me he herido, para ver si aún sigo sintiendo y padeciendo. Hoy me he concentrado en el dolor sufrido, pues es lo único real ahora mismo, es lo único real hoy. Mañana...mañana será otro día.
Hoy me he defraudado, me he herido, para ver si aún sigo sintiendo y padeciendo. Hoy me he concentrado en el dolor sufrido, pues es lo único real ahora mismo, es lo único real hoy. Mañana...mañana será otro día.
domingo, 20 de noviembre de 2011
Mi política interior, artículo 1:
-Todos los canis/manines/poligoneros/bacalas y sus equivalentes femeninos en suelo terrestre serán utilizados como incubadoras humanas para la crianza de aliens en sus estómagos.
En días así, me gustaría vivir en Huesca
miércoles, 16 de noviembre de 2011
Anécdotas del Licenciado Perra (III)
Corría el año 1440, yo estaba en Maguncia, Alemania, de vacaciones nivales. De pronto se me ocurrió que tenía que haber una forma de propagar mis ideas, por lo que decidí hacer que alguien inventara la imprenta. Seleccioné a un hombre que vi un domingo de mercado, en el puesto del herrero, se llamaba Johannes Gutenberg. Me presenté en su casa aquella tarde y bajamos a su taller. Una vez allí, lo encadené a una roca oportunamente colocada en el centro de la estancia y, echándole un frasco de tinta de calamar en su cara, cogí unos papeles y se los estampé en la cara, uno a uno, durante 4 horas. Cuando iba por el papel número 802, el alemán se dio cuenta de lo que yo pretendía. Después de desencadenarlo y limpiarle la cara metiéndole la cabeza en un tonel de agua fría, me dijo que ya había sufrido suficiente, que haría lo que fuera, que la idea de inventar una imprenta era algo extraordinario y nuevo para la humanidad. Y la inventó.
Después, volví a tirarle un tarro de tinta a la cara, los compuestos químicos de la sustancia le corrosieron la cara. Me coloqué el bombín y volví a casa.
Aquella noche cené ancas de rana, ranas de mis enemigos.
Después, volví a tirarle un tarro de tinta a la cara, los compuestos químicos de la sustancia le corrosieron la cara. Me coloqué el bombín y volví a casa.
Aquella noche cené ancas de rana, ranas de mis enemigos.
sábado, 12 de noviembre de 2011
Anécdotas del Licenciado Perra.
Recuerdo que una vez me perdí, con once años.
Pasé nueve días en los bosques de Alaska, y sobreviví.
Comía bayas y me limpiaba el culo con hiedra. En casa ni se enteraron, padre estaba ocupado con la invención del universo y madre se encontraba haciendo la colada. Cuando volví a casa lo primero que hice fue ir a la cocina y prepararme un sandwich. No me pasó nada, pero me escocía el culo cosa mala.
Pasé nueve días en los bosques de Alaska, y sobreviví.
Comía bayas y me limpiaba el culo con hiedra. En casa ni se enteraron, padre estaba ocupado con la invención del universo y madre se encontraba haciendo la colada. Cuando volví a casa lo primero que hice fue ir a la cocina y prepararme un sandwich. No me pasó nada, pero me escocía el culo cosa mala.
viernes, 11 de noviembre de 2011
miércoles, 9 de noviembre de 2011
martes, 1 de noviembre de 2011
The killing joke
Había una vez dos tipos en un manicomio. Una noche deciden escapar, ya no les gusta vivir en él.
¡Así que deciden escaparse!
Entonces, se suben al tejado y ahí, a un salto de distancia, ven las azoteas de los edificios de la ciudad, que se pierden en el horizonte bajo la luz de la luna, que se pierden hacia la libertad.
El primer tipo da un salto y cruza sin problemas, pero su amigo no se atreve a saltar porque teme caerse.
Entonces, el que ha saltado, tiene una idea. Y dice:
¡Eh!¡llevo una linterna encima!¡alumbraré con ella la distancia que separa ambos edificios para que puedas caminar por el haz de luz y llegar hasta aquí!
Pero el otro niega con la cabeza y dice:
¿Pero acaso crees que estoy loco?¡la apagarías cuando fuera por la mitad!
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